El corazón del Sol establece pautas
de progreso para todas las almas peregrinas que en ascenso encumbrado transitan
la Senda de la Vida. Las ‘almas’ son
“Mónadas” revestidas de materia mental superior y búdica, es por este
motivo que se ha hablado en otras transmisiones de “burbujas álmicas”, ya que
el Espíritu se reviste de materia mental y búdica creando un espacio semejante
a una “burbuja” sutil, que será el receptáculo en el cual se irán recogiendo
las cualidades de comprensión adquiridas durante la experiencia evolutiva.
La “burbuja álmica” es el
CUERPO CAUSAL, llamado así porque es en ese ‘cuerpo’ de sutilísima materia
suprafísica donde se alojan “las causas” de los sucesivos renacimientos que el
alma necesita para aprender e iluminarse.
La Ley de Renacimiento actúa a
través del Cuerpo Causal, hasta el tiempo en el cual este “cuerpo álmico” se ha
llenado de autoconsciencia y sabiduría, no siendo ya más necesarias, a partir
de allí, las reencarnaciones. Este es el fin del samsára(1) y
la apertura de la puerta del Nirvana, siendo
este estado el primer paso del alma hacia senderos suprafísicos desconocidos.
Nirvana(2) significa ‘extinción’, lo cual
debe interpretarse en el sentido de extinción del “yo”, es decir, del kamamanas(3).
Cuando el alma ha transitado los
senderos del placer y del dolor, y ha conocido por experiencia directa una y
otra vez a través de los sucesivos renacimientos la naturaleza del deseo, de los
apegos, de la ambición, del sentido de los ideales, etc.; cuando el alma ha
“caminado todos los caminos” puede entonces asimilar una comprensión de la vida
que puede traducirse como SABIDURÍA (al menos, un grado de sabiduría). Esta
Comprensión alcanzada pone al alma fuera del control del “deseo” (en sus
diferentes aspectos y formas) y la alinea con la Mónada, con la Voluntad
Espiritual.
La total alineación entre alma y
mónada es “nirvana”. Este estado es “conciencia átmica”, es decir, “conciencia
espiritual”.
Estas palabras son conceptos que
señalan hacia una realidad que solo pueden entender quienes lo empiezan a
vivenciar en sí mismos. Las solas teorizaciones no sirven del todo para
“comprender”, y menos en este nivel. Esto debe ser ‘realizado íntimamente’,
vivenciado. Pero a este nivel hablar de “experiencia” es una sutil trampa, ya
que en toda experiencia hay un ‘yo’ que es el experimentador, un ‘centro’ que
experimenta…; y esta idea va justamente en contra del concepto de nirvana, del cual estamos hablando,
porque nirvana es la “extinción del
yo”, del ‘ego’ como centro de experiencias. (Este tema no puede ser tratado
aquí en más detalle…)
No obstante este tipo de información
forma parte del conocimiento instructivo que las almas deben incorporar para
que, llegado el momento, puedan comprender más claramente los “sucesos
internos”. La mente debe acompañar los “eventos internos” del alma con una
instrucción conceptual clara y verídica. Estando así alineada con los procesos
reales del alma, la mente deja de ser un estorbo y reposa en mayor equilibrio
en “el Conocimiento”. Este es uno de los fines de este tipo de transmisiones:
preparar a la mente para los procesos álmicos con el conocimiento básico
adecuado.
Repetimos: No es “teorizar” lo que nos interesa, sino establecer una base de
conocimientos claros y sólidos en la plataforma mental de los estudiantes que van camino a eventos
internos de naturaleza mística.
Si nuestras palabras, vertidas a
través del canal, sirven finalmente de ayuda para aliviar el dolor de la
incertidumbre en los inexpertos estudiantes,
entonces justificados serán los esfuerzos en manifestar estas enseñanzas.
Todas
las almas aprenden a través del “deseo” y del “apego” que el deseo produce.
Satisfacción y dolor son las dos caras de la ‘moneda’ llamada “deseo”. “Desapego
y Discernimiento” son las dos
caras de otra ‘moneda’ llamada “Libertad”. La liberación del alma de la
cárcel limitada del deseo y de su opresión y sufrimiento resultante, se
encuentra asimilando profundamente las ‘dos caras’ de la moneda de la Libertad.
Cuando el alma ve el real valor,
significado y propósito de la “moneda deseo”, encuentra en su senda un nuevo
tesoro por el cual vivir, encuentra la “moneda Libertad”. Allí comienza una
nueva vida, por una senda diferente. Este es el llamado “Sendero”; la Senda de
la evolución consciente del alma.
Pero mientras el alma apegada esté a
la “moneda deseo” y crea y sienta que con esa ‘moneda’ puede comprar gran
cantidad de objetos que cree necesitar, porque cree depender de ello para su
propia felicidad y realización; entonces el Tesoro “Libertad” permanecerá aún
oculto.
El alma
debe agotar en gran medida el deseo, mientras va adquiriendo ‘comprensión’,
antes de encontrar el Conocimiento que conduce a la Libertad.
La GNOSIS esencial, que es el
conocimiento del “Yo” y del “no-yo” es la puerta hacia la Libertad. Pero la
mente debe “desaprender”, es decir deshacerse de muchas creencias erróneas
incorporadas irreflexivamente y por costumbre, tradición, o hábito, y adquirir
conocimiento esencial y claro, para hallar la puerta hacia la liberación de la
conciencia. Solo así el “deseo” es puesto en su justo lugar y el alma sale de
su prisión de oscuridad y limitación, para encontrar la alegría de la
Integridad, la Unidad y la Paz.
El deseo es un
gran Maestro, no lo reprimáis…, pero tampoco os apeguéis a él, porque os atará
y encadenará a situaciones desdichadas.
Aprended a convivir con el deseo, sin que este os maneje. Por el
contrario, sea vuestra voluntad y discernimiento la guía rectora de vuestra
vida.
Solo las almas con cierto camino ya
transitado pueden asimilar estas palabras.
El corazón del Sol guía a las almas
desde regiones espirituales. El DESEO es parte de la gran aventura de la
existencia. Procurad conocerlo, aprender de él; pero también aprended a trascenderlo.
Esto último solo llega a las almas maduras, las que han encontrado un nuevo
sentido de la vida, el cual el deseo jamás puede llenar…
Meditad en estas palabras.
En Luz y Paz:
Hermano Sol
1-
Samsára:
(sánscrito).Literalmente:
“rotación”. La continua ‘rueda’ de renacimientos y muertes. Los renacimientos
humanos representados como un círculo continuo.
2-
Nirvana: (sánscrito). Extinción. Puede
entenderse también como la “absorción” del cuerpo
causal por el Espíritu, al no quedar ya ‘causas’ para más encarnaciones.
3- Kamamanas:
(sánscrito).
‘Kama’ es deseo, y ‘manas’ – mente. Kamamanas es, por lo tanto, la conciencia humana aferrada a la
energía del deseo (en todas sus formas) y la porción inferior de la mente que
se une al deseo, es decir, la mente unida al deseo y condicionada por este. Se
entiende a kamamanas como el yo
inferior o ego personal humano, de naturaleza esencialmente ilusoria, pero
aparentemente muy ‘real’ mientras existe como ‘energía’ pulsante y demandante.
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