Fluyen
Energías Doradas al Corazón de la
Tierra.
Como
ya saben los estudiantes que han
visitado el presente Blog, la Tierra posee en su núcleo central un Sol de
energía magnética-espiritual que pulsa radiaciones cíclicas hacia todo el Globo
Planetario. Esas pulsaciones transmiten emanaciones solares-espirituales a
manera de “sístole-diástole” reciclando la energía terrestre, y se suceden una
y otra vez en grandes ciclos periódicos en los cuales nuevas ‘oleadas de vida’ son impulsadas desde la
Vida Divina central del Planeta hacia la superficie material, en su esférico
Cuerpo.
La
Tierra es un SER, como ya se explicó en transmisiones anteriores, que está evolucionando,
como lo hace cualquier entidad viviente, desde el diminuto átomo simple de
hidrógeno, hasta la entidad viviente de un gran sistema solar múltiple. Todo
evoluciona, todo está sometido a “sístoles y diástoles” de Vida Divina; todo
“late” en el Gran Universo, y en el mismo centro de este Universo Local,
Nebadón, late un gran corazón viviente de Conciencia que con sus doradas
pulsaciones da vida al gran ‘grupo de galaxias’ que giran en su derredor. Cada
galaxia posee a la vez un “centro cardíaco solar” que rige a los miles de
millones de astros luminosos que componen sus elípticas estructuras.
Todos
estos fabulosos “Organismos Cósmicos” son “CONCIENCIAS”, unas contenidas dentro
de otras, y todo responde a un gran PLAN EVOLUTIVO CÓSMICO.
Ya
sabéis de estos conceptos, ya se han dado pautas más precisas para ahondar en
los mismos. Nuestra intención aquí y ahora, es recordar la importancia que
revisten este tipo de conceptos, porque acercan a la mente del hombre a la
comprensión de la Vida.
El hombre es polvo de estrellas organizado en ‘forma’ y
‘conciencia’.
Esta
es una verdad irrefutable, inclusive para vuestra actual ciencia.
Una conciencia cósmica de la vida debe ser
realizada y conquistada por todos los estudiantes de la vida en este tiempo,
es por este motivo que muchos de los conceptos que hemos exteriorizado tienen
que ver con esta temática.
El
plan de estos escritos ha sido activar en los estudiantes 3 elementos básicos y
muy importantes para el ‘despegue’ o el ‘avance’ en el Sendero:
1-
El
autoconocimiento.
2-
El
conocimiento de la vida cósmica y sus Leyes rectoras.
3-
La situación
planetaria en estos tiempos.
Estos 3 puntos han sido
considerados con detenimiento durante el fluir de las sucesivas transmisiones
que se fueron precipitando. Ya se explicó que no es nuestra intención atraer
“seguidores” de ninguna clase; nuestro objetivo es informar y dar pautas
conceptuales claras, como bases o “cimientos” para el trabajo interior. (No debe el estudiante olvidar que los “conceptos” son energías, y como
tal, tienen una importancia fundamental en una fase del progreso del alma
humana).
El “trabajo interior”, sin embargo, es algo que muchos
estudiantes ignoran, porque se quedan con la sola actividad intelectual sin
ahondar en sí mismos la naturaleza del “CAMBIO” y la forma de llevarlo a cabo.
Sin “autoconocimiento”
(1° punto) el trabajo interior no es
posible; es por ello que hemos puesto énfasis en esta temática a lo largo de
los enunciados conceptuales manifestados en las transmisiones.
El proceso
del autoconocimiento conduce a un ‘darse
cuenta’ del SER, de “lo verdadero”, y a desechar “lo falso” del ‘sí mismo’ a
través de un proceso de ‘desidentificación’. Esto incluye el estudio de la
constitución del hombre y la “meditación”.
Llegar a comprender este
tipo de conceptos es de fundamental importancia en el Sendero, ‘ese’ que
conduce hacia la Vida Una.
“El conocimiento de la
Vida cósmica y de sus Leyes” (punto 2) no ha sido ofrecido para llenar de
teorías hipotéticas a la mente humana, sino porque con la comprensión del
esquema mayor en el cual la vida humana está inserta, el Sendero adquiere un
‘paso’ más pacífico. Muchos estudiantes desesperan ante problemas menores por
los cuales están atravesando y esto ocurre porque han perdido la idea del
“contexto mayor” en el cual todo está contenido. “Si el ‘árbol’ ve que está perdiendo sus hojas, no desesperará si
comprende la ‘ley’ de las estaciones y entiende que ‘es otoño’, y si observa
además que en el bosque todos los demás compañeros árboles están atravesando
por un proceso similar…”
La comprensión del contexto mayor y de las Leyes que operan
en la Vida, forma parte del “trabajo
interior” que cada estudiante debe efectuar a consciencia.
“La situación planetaria
en estos tiempos” (punto 3), no es menos importante que los 2 puntos
anteriores, porque además de entender las Leyes ocultas de la Naturaleza que
rigen la vida material y del alma observando el contexto universal e individual
sobre el cual operan esas Leyes, hay que entender cuál es la situación
presente.
Los estudiantes deben tener una óptica y entendimiento claro
y lo más preciso posible de cuál es la situación humana y planetaria en el
presente período.
Esto es importante porque
existen deslices y errores en los estudiantes al encerrarse en una ‘burbuja’ de
conocimientos e ideales espirituales, sin ver la realidad (en ciertas áreas, de
gravedad) de situaciones globales que forman parte del Ser Humanidad en el Hoy.
(Ya hemos hablado con anterioridad del “falso positivismo” que confunde a
tantos estudiantes…).
Existe un peligro para los
estudiantes recién llegados al Sendero (almas jóvenes), y es este: “no ver lo
que tienen frente a sí mismos”.
Muchos estudiantes se
llenan de estudios filosóficos, metafísicos y espirituales y esto genera una
“nube mental” que les impide ver la realidad en la cual están inmersos. Estos
estudiantes adquieren conocimientos abstractos, lo cual está bien, pero pierden
“sentido común” y objetividad, lo cual es perjudicial. Es por ello que este 3°
punto: “ver la realidad concreta de la situación planetaria tal como es”, es
una faceta que se integra a las otras dos, porque todo estudiante es parte de
la Humanidad y del Planeta en el cual vive, y negar la realidad viviendo en un
mundo mental de fantasías…, no es el camino.
En esta transmisión hemos recordado
el valor de la comprensión de 3 puntos que, al observarse, facilitarán al
estudiante un progreso seguro en su “trabajo interior”.
Por último, no olvidéis
que: “Es el Sol la guía interna en cada alma”; estos escritos son tan solo
“orientaciones”.
En Luz y Paz:
Fuente Solar.
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